sábado

Gondolieris del riachuelo

Hay algo de lo del riachuelo que me obsesiona, no se por qué, pero mientras, le doy manija. gondolieris del riachuelo

miércoles

Tristes tópicos, pistas para vencer el desamor político

Se inaugura a pedido del (des)ánimo, una nueva sección, PARE DE SOFRER, HIRMAO PROGRESISTA! Elementos de auto-ayuda política para poder llegar a las próximas elecciones sin morir o matar a todos en el intento. Esperemos que les sirva mis queridos internautas!


¿Por que los pobres votan a la derecha? ¿Por qué mi mamá vota a la derecha? eh? eh? a ver? decime! 
No tenemos la respuesta, pero al menos nos animamos a la pregunta, porque como dice un posteo que robé de facebook "Voto aspiracional": que manera más sofisticada de tratar de boludo al prójimo . Y si queridos internautas, criticar al que no piensa como yo, es sin duda no estar entendiendo algo, al 51% del país por ejemplo. 

  • Venezuela, cada persona es una crisis

al basar la ciudadanía en el consumo (o en el acceso menos desigualitario a éste), topamos con la dificultad de construir comunidad. No hay nada más individual que el consumo. No hay nada mas duro que pensar a la querida Venezuela, lea: http://www.revistaanfibia.com/ensayo/venezuela-cada-persona-es-una-crisis/


  • Argentina, el macrismo no es un golpe de suerte

al desplazar el ciudadano al vecino, nuevamente se individualiza el sujeto colectivo. A su vez, la idea de igualdad basada en el progreso por meritocracia, con su vertiente "recuperar la cultura del trabajo" que pulveriza a sindicalistas, planeros, vagos, punteros, populismos, la corrupción k, el flagelo de la droga, lea: https://www.pagina12.com.ar/amp/56997-el-macrismo-no-es-un-golpe-de-suerte

sábado

El pentateuco de los 30

Inmensos aprendizajes que fui cosechando desde el canal de parto hasta acá. Obvio que no soy quien para hablar en nombre de mi yo del futuro, ni de clausurar un proceso, asi que este posteo será otro work in progess (al igual que el post "manifiesto para el desamor") que irá creciendo conmigo o me ayudará a no decrecer por si me pierdo en la ciudad.



1. Nadie tiene la vaca atada. + Nobody has a tied cow  (desde la producción de este blog tenemos especial interés de que esta máxima llegue a los países del norte). El día que entendí esto, dejé terapia.
Exégesis: Todos hacemos lo mejor que podemos -para seguir con las metáforas de vaca- desde la buena leche, pero nadie sabe y vamos todos improvisando por el camino y en esa, a veces podemos pifiarla fiero, lastimar a alguien/es (sobre todo a nosotros mismos) y es parte de los riesgos del rebaño (no se como se dice un conjunto de vacas). Desconfíen de todo aquel que venda libros de recetas, porque a todos, alguna vez, se nos ha quemado el flan aún en baño maría. No hay otra, toca inventar, errar, caer y perdonarse, porque uno, como todo el resto, no tiene la vaca atada. Y no es culpa de la vaca ni del que le da de comer, porque repartir culpas es regresivo y es no ver el recorrido de cada quien. No hay recetas, no hay seguridades, no hay perfección. La vaca nos da la leche, el dulce de leche, la manteca, lecciones de vida y asados. Gracias vaca por todo lo que nos das.
2. Lo que te choca, te checa
Si me tatuara una frase, en un lugar muy muy discreto para estar segura de que nadie la vería jamás, por ejemplo en el páncreas, me tatuaría esta frase. Es sublime. Pura sabiduría en menos de 20 letras (y dos que son mudas). Te invita a hacerte cargo, es una variante mas estilizada de "un dedo que apunta a otro y 3 te apuntan a vos mismo" (muy berreta pero tiene su punto). La forra que coquetea con tu novio, tu jefa que trata a todo el mundo como sus vasallos, el pibe que acapara toda la charla en los asados, todos ellos, y muchos más, son una invitación a que identifiques donde te duele y te pongas  a laburar. Como el olor a podrido es el mensaje de la mandarina para decirte "tirame", la ira/incomodidad es el mensaje para decirte "trabajate ahí" o hay quienes también escuchan "hacete cargo". Puede ser un poco abrumador andar por la vida haciendose cargo de todo (llueve porque no clavé el cuchillo en la tierra) pero es un buen ejercicio para tratar de contrarrestar las tendencias de culpar y quejarse de todo y ser el muy tentador personaje de la victima universal, como los que piden en el subte.


miércoles

Valores democráticos sub 10

Zamba fue de visita a la Casa Rosada, y le explicaron en qué consistió la dictadura militar
pd. que preciosura, por cosas como estas, vamos a volver! ✌

Misioneros de Francisco: capillas en las villas donde conviven política y religión



Miriam Alegre, una correntina de 38 años, juega a que es Cristina Kirchner. En la entrada de un salón de ladrillos desnudos de revoque, a medio terminar, reúne a diez vecinas del barrio Las Rosas, en Melchor Romero. Es una villa de pastos altos y casillas de madera, levantada por mujeres que abandonaron sus hogares huyendo de las golpizas de sus esposos. "Quería darles esta cadena nacional -les dice, entre solemne y risueña- para comunicarles que pronto vamos a tener la instalación de luz."

A su espalda, una figura de la Virgen de Luján indica que el sitio elegido para el anuncio no es un lugar cualquiera. En poco tiempo ahí se inaugurará una de las primeras capillas de los Misioneros de Francisco. Es un movimiento católico creado por Emilio Pérsico, el jefe del Movimiento Evita, que se propone levantar una capilla en cada asentamiento y barrio pobre de la Argentina.


La iniciativa, en la que se funden política y religión, se puso en marcha a partir de un encuentro que Pérsico, secretario de Agricultura Familiar, tuvo con el Papa, en agosto pasado. De buena relación con Bergoglio desde que era arzobispo de Buenos Aires, el dirigente kirchnerista solía quejarse por las trabas que la Iglesia ponía a la apertura de capillas, en contraste con la ligereza con que se abren templos evangélicos. "Ahora ya tenés mi autorización", cuenta Pérsico que le dijo el Papa, en Santa Marta.

Inspirado en la Teología del Pueblo y en el mensaje del Sumo Pontífice para construir "una Iglesia pobre y para los pobres", Misioneros de Francisco es un movimiento independiente de la jerarquía eclesiástica. "Somos parte de la Iglesia Católica, pero no como institución, sino como pueblo de Dios", explican sus fundadores. El grupo también lo integran Enrique Palmeyro, un ex seminarista que trabajaba con Bergoglio y al que el Papa designó al frente de la flamante Red Mundial de Escuelas, y el padre Eduardo Farrell, párroco de Cuartel V, un barrio de Moreno.


Aunque buena parte de sus miembros son del Movimiento Evita, Misioneros de Francisco tampoco tiene un vínculo formal con la agrupación. Su misión, según el primer documento del movimiento, es "acompañar la religiosidad y la cultura popular en las barrios humildes facilitando la creación de capillas para cultivar la fe y el espíritu comunitario". En los últimos meses se abrió una capilla, en el barrio Toba, una villa de Rosario, y comenzó la construcción de otras 21, la mayoría en el Gran Buenos Aires.

Los pequeños templos no tendrán relación oficial con el obispo del lugar. Estarán a cargo de un "servidor", un referente del barrio que asumirá el papel de agente evangelizador. La idea es que ahí se hagan actividades religiosas, como velatorios y cadenas de oración, y todo tipo de encuentros comunitarios, como cumpleaños de 15 y festejos por el Día del Niño. La aspiración de máxima es que, a instancias de algún "cura compañero", se puedan celebrar bautismos comunitarios y hasta dar misa. El nombre de las capillas lo elegirán los vecinos. Los de una villa de Madariaga llamarán a la suya Iván Sepúlveda, por un joven víctima de gatillo fácil.


En el barrio Las Rosas todavía no decidieron el nombre de su capilla. "La mayoría somos devotas de San Expedito, el santo de la causa justa y urgente", cuenta Miriam, militante del Frente de Mujeres del Movimiento Evita. La capilla se está construyendo con la mano de obra de los vecinos. Los materiales los consigue Misioneros de Francisco, a partir de donaciones. Después de la "cadena nacional", Miriam invita a sus vecinas a la peregrinación a San Cayetano que el movimiento organiza para el viernes próximo.

Los detalles de la procesión se ultiman en un plenario de los Misioneros de Francisco, en la sede del sindicato de ladrilleros, en Ciudadela. "Para darle mística militante podríamos hacer una bandera", plantea una joven que llegó desde Lobos. La propuesta entusiasma a los 40 misioneros reunidos en el lugar. Un "servidor" de Berazategui ofrece una camioneta con un equipo de sonido. Pérsico sugiere estampar camisetas. Para cerrar el encuentro, el padre Farrell propone bendecir el pan y el vino, colocados al pie de una figura de la Virgen de Luján. Entonces en el lugar, un quincho poco habituado a las ceremonias religiosas, se filtra un viento místico. Todos levantan el brazo derecho con la palma hacia delante. "Unos tienen y no pueden; otros pueden y no tienen. Nosotros, que tenemos un podemos, demos gracias al Señor."

También se preparan para la peregrinación en la comunidad Pantalón Cortito, del barrio El Peligro, en La Plata. Es un predio rural ocupado en 2000 por la organización comunitaria para extender el trabajo que hacían con chicos de la calle y jóvenes adictos. Los Misioneros de Francisco proyectan reparar la capilla de la Virgen de Copacabana, levantada ahí en los 60, hoy en ruinas por los tornados. "Por mi trabajo siempre estuve cerca de la vida y de la muerte", cuenta Susana Gómez, de 57 años, fundadora de Pantalón Cortito y futura "servidora". Rubia, trencitas finitas estilo hippie, en la frente lleva tatuada la Chacana o "cruz andina", símbolo de los pueblos originarios de Bolivia.

"La idea es que sea un lugar para juntarse y vivir la fe", explica, rumbo a la capilla. A un costado, Angie, la catequista de la comunidad, hace una ronda con un grupo de chicos, la mayoría bolivianos, hijos de las familias quinteras de la zona. En el fondo de la capilla sobresale un mural de casi tres metros de alto, que tiene en el centro un Jesucristo maniatado y sangrante. En una esquina del mismo mural, otro dibujo deja en claro que el templo no se atiene a las reglas de lo que los Misioneros de Francisco llaman la "cultura eclesiástica": es de un grupo de mujeres con pañuelos en la cabeza, que camina formando un círculo. "Las Madres", dice al pie.
LA NACION
Política